En Estados Unidos tres agencias tienen el poder de designar a personas con el título de 'astronautas'.
✅La NASA
✅Las Fuerzas Armadas
✅La Administración Federal de la Aviación (FAA)
Aunque cada una tiene su propia definición sobre el término, la NASA y los militares tienen un primer requisito que es ser empleados suyos, con lo cual eso hace que Jeff Bezos o Richard Branson no clasifiquen.
Quedaría entonces la FAA, pero justo el pasado martes 20 de julio, el mismo día en que Bezos cumplía su hazaña junto a su hermano, un joven de 18 años y una mujer de 82, la agencia federal publicó nuevas directrices sobre la definición de la figura del 'astronauta'.
Según nuevas reglas de la FAA, publicadas este martes, estos son los requisitos que debe cumplir un astronauta para ser considerado como tal por el programa 'Alas de Astronautra Comercial', que inició en 2004:
✅los aspirantes deben ser parte de la tripulación del vuelo y de una compañía certificada por la FAA y
✅haber "demostrado actividades durante el vuelo que fueron esenciales para la seguridad pública o contribuyeron a la seguridad de los vuelos espaciales tripulados"
✅salir por encima de las 50 millas (80 km) sobre el nivel del mar
✅ser nominados.
En cuestión de altitud alcanzada ambos aprueban, pero son los otros requisitos los que complican la definición.
En cuanto al hecho de ser parte de la tripulación, eso descartaría, por ejemplo, al joven de 18 años que viajó con Bezos y que pagó por su asiento en la nave, lo cual lo convierte en un turista.
También cuando se habla de parte de la tripulación se hace referencia que haya entrenamiento, habilidades, que las personas tengan alguna responsabilidad o jueguen un papel determinado en el vuelo. En ese caso ni Branson ni Bezos clasifican, aunque sí pertenecen a las compañías que lo llevaron a cabo.
También hay margen de interpretación en el requisito de haber "demostrado actividades durante el vuelo que fueron esenciales para la seguridad pública o contribuyeron a la seguridad de los vuelos espaciales tripulados".
Aquí, al menos en el caso de Branson, que realizaba un vuelo de prueba, puede haber margen para entenderlo como un aporte a la seguridad de los vuelos espaciales tripulados, aunque su papel fue simbólico y no aportó ninguna habilidad.
Una de las acompañantes de Branson, en cambio, la instructora Beth Moses, empleada de Virgin Galactic, ya tiene un par de alas de astronauta comercial, otorgadas en abril de 2019 por un vuelo de prueba anterior con Virgin Galactic. Moses es además la primera mujer en volar al borde del espacio en un vehículo comercial.
En el caso de Bezos parece ser aún más evidente que no cumple con los requisitos, aunque consiguió más altura, ya que el cohete New Shepard y la cápsula están diseñadas para volar de forma autónoma, con lo cual se controla desde la Tierra y nadie de la tripulación tiene que hacer nada durante el vuelo.
Una excepción podría hacerse, en cambio, con Mary Wallace Funk (Wally), de 82 años, que viajó con Bezos, ya que 60 años atrás a Wally se le negó finalmente la oportunidad de ir al espacio como astronauta por ser mujer, a pesar de haber recibido el mismo entrenamiento y formación que los hombres.
De cualquier forma, según la FAA, antes que nada, para recibir el título de astronauta hay que estar nominado, y la agencia no ha recibido ninguna solicitud por el momento, según informó un portavoz a CNN.
Ambos millonarios, y sus tripulaciones, recibieron alas tras completar sus vuelos, pero eran insignias simbólicos creadas por sus compañías, sin valor oficial.