Zervos, una antigua concursante del programa 'The Apprentice' dice que todo empezó cuando intentó conseguir trabajo en las empresas de Trump luego de que la temporada del programa culminó.
Summer dice que, cuando se reunió con el magnate en un hotel, él "comenzó a besarla con la boca abierta". Ella afirma que trató de apartarse, peroTrump continuó intentando besarla y que en un punto, el ahora candidato presidencial republicano, le pidió que se acostaran a ver televisión.
Anderson, ahora de 46 años, afirma que el incidente duró apenas unos 30 segundos, lo suficiente para sobresaltarse, quitarse la mano de encima y levantarse del sofá de terciopelo donde estaba sentada. La mujer aseguró a The Washington Post que Trump la tocó por debajo de su minifalda en su entrepierna y su vagina a través de la ropa interior.
Antes de irse miró al hombre que acababa de manosearla: era Donald Trump. "Sus cejas son inconfundibles", afirmó Anderson al recordar ese momento.
Miss Washington 2013 Cassandra Searles también denunció a Trump de "continuamente agarrarme el trasero" en una entrada en Facebook.
La concursante, que se refiere a Trump como un “misógino” asegura que trataba a las participantes en el certamen de belleza como “ganado“.
Uno de los testimonios que salió a la luz este miércoles es el de Jessica Leeds, de 74 años, quien asegura que hace más de tres decadas Trump le tocó los senos y trató de subir su mano por su falda durante un vuelo.
Leeds contó al diario que el incidente se produjo durante un viaje de vuelta a Nueva York cuando inesperadamente la azafata le invitó a pasar a primera clase y se sentó junto a un joven Donald Trump, al que no reconoció.
Boyne, una empresaria de la industria de comida y salud quien en ese entonces tenía 25 años, le describió a la publicación Huffington Post cómo en el verano de 1996, durante una cena en un restaurante con ella y otras personas, Trump hizo que varias mujeres desfilaran frente a su mesa, miró bajo sus faldas, comentó sobre si estaban usando ropa interior o no y sobre cómo lucián sus genitales.
“Fue la escena más ofensiva de la que he sido parte en mi vida", le dijo Boyne a The Huffington Post este jueves. “Me quería largar de ahí.” Boyne le dijo a Huffington Post que había llamado esa noche a su compañera de cuarto a contarle, pero esta lo niega.
Jill Harth conoció a Trump como organizadora de un concurso de belleza, asegura que la acosaba y acabó denunciándole por un incidente durante una fiesta en su finca de Mar-a-Lago en el que la manoseó y la sujetó empujándola contra una pared en lo que la afectada calificó como un “intento de violación”.
No obstante, la denuncia terminó en un acuerdo extrajudicial que incluyó una cláusula de confidencialidad.
La noche de este miércoles, después de que se publicara la historia , Mindy McGillivray le aseguró al Palm Beach Post que Trump la había tocado de manera inapropiada en contra de su voluntad en su hotel Mar-a-Lago en Palm Beach hace 13 años, cuando ella tenía 23 años.
McGillivray no denunció el incidente a las autoridades pero, según el relato, su acompañante ese día el fotógrafo Ken Davidoff recuerda cómo la joven le contó que Trump le había tocado el trasero.
La ex Miss Utah Temple Taggart también acusó al candidato de haberla besado contra su voluntad.
"Me besó directamente en los labios. Pensé, 'Dios mío, qué asco'. Estaba casado con Marla Maples en ese momento. Creo que hubo otras chicas que besó en la boca. Yo pensé, 'Wow, eso es inapropiado'", le dijo Taggart a The New York Times.Dijo que hizo lo mismo un par de meses después en la Torre Trump cuando la invitó a discutir su carrera.
Rachel Crooks también contó al New York Times que el candidato la besó en la boca sin su permiso cuando trabajaba como recepcionista en la Torre Trump en Nueva York.
Según Crooks, que entonces tenía 22 años, se acercó a saludarle mientras esperaba el ascensor, se dieron la mano y acto seguido la besó en las mejillas y luego directamente en la boca, lo que le hizo sentir "insignificante".
La periodista de la revista PeopleNatasha Stoynoff reveló también su propia experiencia cuando Trump la besó agresivamente sin su consentimiento durante una entrevista en su vivienda de Mar-a-Lago en 2005.
La reportera, que solía cubrir los asuntos de la familia Trump, acudió para realizar un reportaje por el primer aniversario de boda del magnate con su actual esposa Melania Knauss. Cuando Melania – embarazada de su hijo Baron – subió a cambiarse de ropa para el reportaje, Trump invitó a la periodista a mostrarle otros cuartos de la lujosa vivienda y en una de ellas la acorraló empujándola contra la pared y comenzó a besarla sin su consentimiento.